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Cada vez existe una mayor demanda de tratamientos naturales, económicos y seguros para la fibromialgia, por lo que en este momento se está tratando de ver lo que puede ofrecer el cannabis al respecto. Vamos a revisar la investigación actual sobre el tema para saber si hay esperanza de encontrar tratamientos a base de cannabis de cara al futuro.
En los últimos años, se han recopilado muchas pruebas a favor de la capacidad terapéutica del cannabis. Los cannabinoides cada vez están más presentes en la medicina moderna, se han utilizado durante décadas para tratar dolencias como las náuseas que provoca la quimioterapia, y ahora se ha recurrido a ellos para el tratamiento de dos tipos de epilepsia severa[1]. Por ello, los investigadores están estudiando más a fondo si el cannabis y sus derivados podrían ser útiles para las personas que padecen fibromialgia.

A continuación, vamos a echar un vistazo al estado en el que se encuentra actualmente la investigación médica sobre el consumo de cannabis para aliviar los síntomas de la fibromialgia. Pero primero, vamos a revisar la fibromialgia (FM), una enfermedad compleja.

¿QUÉ ES LA FIBROMIALGIA?
La fibromialgia es un trastorno que se define por dolor crónico a nivel muscular y articular, y se acompaña de síntomas relacionados, como fatiga, problemas para dormir y problemas de memoria y del estado de ánimo. La causa de la fibromialgia todavía no está clara, pero se cree que la fibromialgia amplifica las sensaciones dolorosas al afectar la forma en que el cerebro procesa las señales de dolor.

Muchas veces, los síntomas de la fibromialgia se presentan después de un trauma físico, como una cirugía o una infección, pero también pueden estar causados por el estrés. También hay casos en los que la fibromialgia se presenta sin una causa evidente. Las mujeres tienen más probabilidades de desarrollar fibromialgia que los hombres. Las personas diagnosticadas con FM suelen sufrir de ansiedad y depresión, y también es frecuente que se les presenten afecciones psicofisiológicas como el síndrome del intestino irritable, el trastorno de la articulación temporomandibular (ATM) y dolores de cabeza.

No existe una cura para la fibromialgia, pero hay varias opciones que pueden proporcionar cierto alivio, desde analgésicos hasta ejercicios y técnicas de relajación y reducción del estrés. ¿Podría ser el cannabis una opción de tratamiento prometedora para quienes padecen fibromialgia?
EL SISTEMA ENDOCANNABINOIDE
El cannabis en realidad lleva mucho tiempo estando en el punto de mira del sector farmacéutico. Lo que llama la atención del cannabis, desde un punto de vista medicinal, es la cantidad tan elevada de cannabinoides y terpenos que contiene, unas sustancias con un potencial muy valioso. La forma en que estos compuestos interactúan con el sistema endocannabinoide (SEC) del cuerpo humano, una red de receptores de cannabinoides naturales presente en el cerebro, el sistema nervioso, el sistema inmune y otras partes del cuerpo, es de gran interés para los investigadores. Hay dos receptores cannabinoides principales en el sistema endocannabinoide: CB1 y CB2.

Los receptores CB1 se encuentran principalmente en las neuronas del cerebro y el sistema nervioso, y en ciertos tejidos y órganos como el bazo y el corazón.
Los receptores CB2 se encuentran principalmente en las células inmunes llamadas microglía, ubicadas en todo el cerebro y la médula espinal. Su función todavía no está muy clara, pero están involucradas en la percepción del dolor en el cerebro, y se cree que juegan un papel muy importante y específico en el desarrollo del dolor crónico.

CANNABIS Y FIBROMIALGIA
A medida que comprendemos las funciones del sistema endocannabinoide, las posibilidades terapéuticas del cannabis cada vez se muestran más evidentes, incluso para enfermedades como la fibromialgia.

La fibromialgia suele asociarse con los siguientes síntomas:

  • Dolor crónico
  • Rigidez muscular
  • Dolor articular
  • Fatiga y dolores de cabeza
  • Problemas de intestino y vejiga
  • Insomnio y trastornos del sueño
  • Depresión y mal humor
  • Curiosamente, el SEC regula estos mismos fenómenos y funciones corporales, lo que ha llevado a los investigadores a relacionar la fibromialgia con esta red reguladora.

El Dr. Ethan Russo, que fue asesor médico Senior de GW Pharmaceuticals y ahora es director de investigación y desarrollo del International Cannabis and Cannabinoids Institute, afirma que la causa subyacente de muchas enfermedades que encuentran alivio en el cannabis podría ser el hecho de tener bajos los niveles de cannabinoides.

Según el artículo científico de Russo sobre la deficiencia clínica de endocannabinoides[2] como una posible razón para la fibromialgia, la migraña, el síndrome del intestino irritable y otros síndromes resistentes al tratamiento, la interrumpción de la comunicación entre el cerebro y ciertas partes y funciones del cuerpo podría estar causada por un desequilibrio de los cannabinoides en nuestro cuerpo. También explica cómo el THC reemplaza a uno de los endocannabinoides naturales de nuestro cuerpo, la anandamida, que reduce la hipersensibilidad.

Pero Russo no es el único investigador que realiza estudios sobre los efectos de los cannabinoides para tratar la fibromialgia.

ESTUDIOS RECIENTES PARA ALIVIAR EL DOLOR DE LA FIBROMIALGIA CON CANNABIS
En un estudio publicado en 2019 llamado «Safety and Efficacy of Medical Cannabis in Fibromyalgia»[3], los investigadores examinaron a 367 pacientes con fibromialgia que consumieron cannabis durante seis meses. Los investigadores quisieron determinar si el cannabis tiene el potencial de ayudar con el alivio del dolor relacionado con la fibromialgia y qué posibles efectos secundarios podría tener en los pacientes.
De los 367 pacientes, 261 permanecieron en el estudio, ya que algunos abandonaron a mitad del mismo. Los pacientes comenzaron el ensayo, que duró seis meses, con una intensidad de dolor inicial de 9 en una escala de 0 a 10. Al final del estudio, la intensidad media del dolor que se recogió se redujo a 5. Además, 194 pacientes (el 81,1%) dijeron que notaron ciertas mejorías en su enfermedad, sin efectos secundarios graves.

Hay que mencionar que los pacientes pudieron reducir o reemplazar sus medicamentos recetados mientras consumieron cannabis: el 22% de los pacientes interrumpió o redujo su dosis de opioides, y el 20% de los pacientes redujo su consumo de benzodiacepinas.

En 2017, la National Academies Press (NAP) publicó un estudio detallado[4] de los efectos terapéuticos del cannabis. Según el estudio, existen pruebas concluyentes que sugieren que el cannabis es efectivo para tratar el dolor crónico en adultos.

En el estudio de 2011, «Cannabis Use in Patients with Fibromyalgia: Effect on Symptoms Relief and Health-Related Quality of Life»[5], se pidió a 28 consumidores de cannabis que informasen de los beneficios que percibieron al consumir cannabis para los síntomas de la fibromialgia. También se examinó a 28 pacientes más con FM que no eran consumidores. Los resultados mostraron «… una reducción significativa del dolor y la rigidez, a nivel estadístico, más facilidad de relajación y un aumento de sueño y de sensación de bienestar [en el grupo de cannabis]. El resultado del componente de salud mental del cuestionario SF-36 fue notablemente mayor en los consumidores de cannabis que en los no consumidores”.

Además, hay que señalar que ninguno de los participantes notó un empeoramiento de los síntomas de la fibromialgia al consumir cannabis.

En un estudio de 2018[6], 25 personas con fibromialgia participaron en una prueba controlada con placebo sobre los efectos analgésicos de la marihuana. Los investigadores administraron tres tipos diferentes de cannabis, cada uno con un contenido diferente de THC y CBD, así como un placebo.

Los resultados mostraron que el 44% de los pacientes comunicaron una reducción del dolor de un 30%, mientras que el 24% informó una reducción del dolor de un 50%. Curiosamente, con el estudio descubrieron que ninguno de los tratamientos tuvo más efecto que el placebo sobre las respuestas al dolor espontáneo o eléctrico, pero quienes consumieron Bediol (que contenía 13,4mg de THC además de CBD) mostraron una disminución del 30% en las puntuaciones de dolor, en comparación con los de placebo (el 90% frente al 55% de los pacientes). Esto llevó a la conclusión entre los investigadores que «las variedades de cannabis con THC causaron un aumento significativo en el umbral de dolor a la presión en relación con el placebo».
Según estos resultados, es necesario realizar más estudios para comprender si los cannabinoides, y cuáles de ellos, podrían ser efectivos para tratar los síntomas de la fibromialgia relacionados con el dolor.

CANNABIS PARA TRATAR OTROS SÍNTOMAS DE LA FIBROMIALGIA
Para los pacientes que sufren de fibromialgia, el dolor muscular y articular es solo uno de los muchos síntomas potencialmente debilitantes. El dolor suele ir acompañado de dificultades para dormir, depresión, nerviosismo, estrés y otros problemas psicológicos.

Aunque aún no está claro si los cannabinoides pueden suprimir la fibromialgia, de una manera significativa a nivel estadístico en una buena parte de la población humana, existen pruebas que demuestran que el cannabis puede ayudar a mejorar el sueño[7] a corto plazo en personas con fibromialgia. Hay que tener en cuenta la siguiente información del capítulo 4 de «Therapeutic Effects of Cannabis and Cannabinoids», publicado en «The Health Effects of Cannabis and Cannabinoids: The Current State of Evidence and Recommendations for Research» (2017):

«Hay pruebas moderadas que demuestran que los medicamentos con cannabinoides, principalmente los nabiximoles, son un tratamiento efectivo para mejorar los resultados del sueño a corto plazo en personas con trastornos para dormir asociados con el síndrome de apnea obstructiva del sueño, fibromialgia, dolor crónico y esclerosis múltiple».

Estos descubrimientos están respaldados por un estudio anterior realizado en 2010[8], que investigó los efectos de la nabilona (una forma sintética de cannabis) sobre el sueño en pacientes con FM. Los investigadores descubrieron que la nabilona fue realmente efectiva para mejorar el sueño en pacientes con fibromialgia, y que una dosis baja de nabilona administrada antes de acostarse «podría tenerse en cuenta como una alternativa a la amitriptilina».

CONCLUSIÓN
A juzgar por la información anterior, el cannabis podría situarse a la vanguardia en nuestra búsqueda de tratamientos seguros, económicos y efectivos para la fibromialgia. La mayoría de las pruebas presentes en esta publicación todavía tienen un carácter anecdótico, pero la investigación de alta calidad que se ha realizado hasta el momento es alentadora. La investigación sigue en curso, y seguramente haya estudios más detallados en fase de preparación.

Fuente: Royal Queen Seeds